Te agradezco por aceptar la labor que Nuestro Padre Celestial te encomendo,
por ser mi guia y mi angel protector en esta tierra,
Gracias por tu amor incondicional,
por todos tus esfuerzos algunos casi sobrehumanos,
por todas tus caricias cuando me mimas y por aquellas
al cuidarme cuando me he enfermado,
por el sueño que no has recuperado por velar el mio,
por soportar mis travesuras de niñez y mis locuras de adolescente,
por seguir brindandome tus consejos aun cuando no los pido,
por verme como todo un adulto con mis cualidades y mis defectos,
por amarme tal cual soy
y seguir amandome de esa manera cada dia,
eres el mejor regalo que Dios Padre me ha dado en esta vida querida mamita¡¡¡¡ Dra. J Cumes
No hay comentarios:
Publicar un comentario